Cabello y uñas en la pre y postmenopausia: cambios comunes y cómo cuidarlos
Dec 02, 2024El impacto de las hormonas en nuestro cuerpo va más allá de lo que solemos imaginar. Durante la pre y postmenopausia, estas fluctuaciones se reflejan en el estado de nuestro cabello y uñas, lo que puede ser frustrante para muchas mujeres. Desde la caída del cabello hasta las uñas quebradizas, estos cambios no solo son comunes, sino que también pueden ser manejados con hábitos adecuados y un enfoque en el cuidado personal.
A continuación, exploraremos los cambios más comunes y compartiremos estrategias para mantener un cabello y unas uñas saludables durante esta etapa.
Cambios comunes en el cabello y las uñas
Cabello:
- Pérdida de cabello: La disminución de estrógenos afecta el ciclo de crecimiento del cabello, llevando a un adelgazamiento o caída más pronunciada.
- Cabello seco y quebradizo: La reducción en la producción de aceites naturales puede hacer que el cabello pierda brillo y flexibilidad.
- Cambio en la textura: Algunas mujeres notan que su cabello se vuelve más fino o incluso cambia de rizado a liso (o viceversa).
Uñas:
- Uñas quebradizas: La caída en la producción de queratina y la deshidratación pueden hacer que las uñas se partan fácilmente.
- Estrías verticales: Pueden volverse más notorias debido al envejecimiento natural.
- Crecimiento más lento: Los cambios hormonales ralentizan el ritmo al que crecen las uñas.
Causas de estos cambios
- Fluctuaciones hormonales: Los niveles de estrógenos juegan un papel clave en la hidratación y crecimiento de cabello y uñas. La caída de estas hormonas afecta negativamente su calidad.
- Deficiencias nutricionales: La menopausia puede llevar a la mala absorción de nutrientes esenciales, como la biotina, zinc, y ácidos grasos omega-3.
- Estrés oxidativo: El envejecimiento y la menopausia incrementan los radicales libres, afectando la salud del cabello y uñas.
Consejos para mejorar la salud del cabello y las uñas
1. Alimentación balanceada
Una dieta rica en nutrientes es fundamental:
- Proteínas: Ayudan a la producción de queratina. Consume carnes magras, huevos, lentejas y tofu.
- Biotina (Vitamina B7): Presente en nueces, almendras, aguacates y huevos.
- Ácidos grasos omega-3: Mejora la hidratación de cabello y uñas. Incluye salmón, sardinas, semillas de chía y linaza.
- Zinc y hierro: Importantes para el crecimiento del cabello. Se encuentran en espinacas, legumbres y frutos secos.
- Vitamina E y C: Ayudan a combatir el estrés oxidativo y a mantener la elasticidad de la piel y uñas.
2. Suplementos clave
Si tienes deficiencias específicas, algunos suplementos pueden ser útiles:
- Biotina: Fortalece cabello y uñas.
- Colágeno hidrolizado: Ayuda con la elasticidad y fuerza.
- Omega-3: Reduce la inflamación y mejora la hidratación.
- Vitaminas del complejo B: Apoyan la producción de energía celular y la regeneración capilar.
3. Hidratación
Beber suficiente agua y mantener la hidratación adecuada ayuda a prevenir la sequedad tanto en cabello como en uñas.
4. Cuidado del cabello
- Usa champús y acondicionadores sin sulfatos, enriquecidos con ingredientes hidratantes como el aceite de argán.
- Evita el uso excesivo de herramientas de calor.
- Realiza masajes capilares con aceites esenciales como romero o lavanda para estimular la circulación.
5. Cuidado de las uñas
- Aplica aceites hidratantes (como aceite de jojoba o vitamina E) en las cutículas.
- Evita el uso constante de esmaltes o acetona, ya que pueden deshidratar las uñas.
- Lima las uñas en una sola dirección para evitar que se quiebren.
6. Manejo del estrés
El estrés aumenta los niveles de cortisol, afectando negativamente el cabello y las uñas. Actividades como el yoga, la meditación, y el journaling pueden ser herramientas útiles para reducir el impacto del estrés.
Cuándo buscar ayuda profesional
Si notas una caída de cabello excesiva o cambios drásticos en las uñas, consulta con un dermatólogo o endocrinólogo. Podría tratarse de una condición subyacente como hipotiroidismo o alopecia androgénica.